Los reflejos primitivos son movimientos espontáneos en respuesta a un estímulo sensorial dirigidos desde el tronco encefálico. Estos movimientos ya se realizan en el útero materno, siendo fundamentales para la supervivencia, descender por el canal del parto la succión...
Pero estos reflejos deberían tener una vida limitada e integrarse en los llamados reflejos posturales, dando lugar a la adquisición de nuevas habilidades tanto visuales como motrices finas y gruesas.
La falta de integración de estos reflejos puede provocar dificultades de diferente índole.
SÍNTOMAS REFLEJOS PRIMITIVOS NO INTEGRADOS
- Malas posturas.
- Pobre coordinación mano-ojo.
- Poco equilibrio.
- Pobre coordinación.
- Problemas de lateralidad y movimientos cruzados.
- Enuresis, y problemas para controlar esfínteres.
- Problemas de atención y concentración.
- Problemas para aprender hacer la voltereta, saltar a la pata coja o montar en bicicleta.
- Mareo por movimiento.
- Problemas de comportamiento: muy introvertido y tímido o agresivo.
- Palabras entrecortadas, lenguaje pobre y tardío.
- Hipersensibilidad a la luz, al tacto, a los estímulos visuales o kinestésicos.
- Mala letra.
- Hiperactividad.
- Se distraen fácilmente.
- Impulsividad.
- Problemas de organización.